CONTROLES
Al imprimir, se deben colocar tiras de control en las hojas para medir y controlar la calidad de impresión. Este control es un prerrequisito que facilita los valores de trabajo de preimpresión dentro de los cuales también deben comprobarse, la ganancia de punto, la densidad, el equilibrio de grises, el trapping, el remosqueo y el doblado de imagen.
Ganancia de punto:
Es un fenómeno en el que los puntos de trama aumentan de tamaño, se expanden al ser presionados en la zona de contacto con los rodillos. Puede afectar al resultado final, los puntos de semitono se agrandan ligeramente, lo que origina manchas de color e imágenes más oscuras.
Densidad:
Medida que expresa la Cantidad de tinta que se le aplica a la máquina sobre un papel determinado. Hay que controlar que sea el adecuado para obtener buenos resultados en el resultado final.
Equilibrio de grises:
En teoría si imprimimos con los tres colores primarios CMY en cantidades iguales nos dará un gris neutro, pero en la práctica seguramente no sea así, no solo depende de la cantidad de estas tres tintas, sino también del tipo de papel, este fenómeno se le conoce como “desviación del color”. Es necesario su control para determinar la mezcla correcta en el resultado final.
Trapping:
Las tintas offset se adhieren con más dificultad a otras tintas que al papel, esta unión se hace “mojado sobre mojado”, es decir, se unen las diferentes tintas antes de que se sequen. Trapping hace referencia a la tinta que es atrapada por otra tinta que está ya aplicada en el papel. El grado de trapping se mide con un densiómetro. Esto también nos influye en el resultado final.
Límite de cobertura de tinta:
Es la cantidad máxima de tinta que se puede aplicar al papel específico con un método determinado, se expresa en porcentajes.
Por ejemplo, si imprimimos CMYK a un 100%, obtendríamos un 400% sobre el papel, por lo que debemos saber el limite de cobertura de tinta que puede absorber el papel que vayamos a imprimir para obtener buenos resultados.
Contraste de impresión/ nivel NCI
Al imprimir se prefiere usar la máxima cantidad de tinta posible, manteniendo el contraste en las áreas oscuras del impreso.
Para determinar la cobertura óptima de tinta debe medirse el contraste de impresión relativo, es decir, la diferencia de densidad del color entre una trama con tono del 100 % y una trama con tono del 80 % divídida por la densidad del tono 100% (para impresión de periódico se suele utilizar una trama con tono del 70 % en lugar del 80 %).
El contraste de impresión óptimo se obtiene cuando la diferencia densitométrica es máxima entre el tono del 80 % Y el tono del 100 %, lo que sucede cuando la densidad en tono lleno es lo más alta posible sin que la ganancia de punto resulte excesiva.
La densidad de la tinta que da el contraste de impresión óptimo también da la cobertura de tinta óptima.
Para medir los tonos con un densitómetro puede utilizarse un filtro de polarización. Este procedimiento se denomina medición NCI (Normal Color lntensity)


